Luego de 2 años de pausa, el festival MUTEK regresó a la presencialidad en nuestro país. La escena local se lució en la cuarta edición de MUTEK AR. Un festival precursor, por su nivel de alta calidad, que llegó para potenciar a las artes digitales, tecnología y música electrónica; sin dudas lo ha logrado. «Está super bueno ver como va madurando la escena, y en esta edición si hubo algo que marcó fuerte es la visibilización local que está en crecimiento.« Afirma su Director Artístico, Gonzalo Solimano.
Los dos primeros días la propuesta se basó en el programa Amplify D.A.I. en Artlab, la casa de MUTEK en Buenos Aires, donde personas que se identifican como mujeres y disidencias ofrecieron wokshops, y charlas, live AV y proyecciones de obras realizadas en el programa de Artlab Residencias Artísticas x Amplify D.A.I.
Cinco de las integrantes de la red Amplify fueron becadas por Fundación Williams para trabajar en la producción de MUTEK.AR, sumar experiencia, conocer el detrás de escena del festival.
Además de las actividades de Amplify D.A.I., en Artlab hubo una muestra colectiva de criptoarte titulada #IRL, curada por Marianella Baladán y Joaquina Salgado. Primera coleccion de Artlab, con obras disponibles y acuñadas en la plataforma BAG. Una obra VR de Juan Le Parc exhibida durante varias jornadas, shows AV como los cruces de Federico Durand y Guillermo Ueno, Sebastián Verea y Carola Zelaschi y cierres de un DJ set del canadiense Vincent Lemieux con visuales de Asdrúbal Gómez.
El Planetario de la Ciudad de Buenos Aires, volvió a ser uno de los espacios favoritos del público. A las dos funciones originales programadas, se agregó una tercera que agotó localidades rápidamente. Se proyectó una obra creada dentro del programa Amplify de las argentinas Joaquina Salgado y Qoa, Nivel V – Oscilación líquida ( Crisis de las coordenadas). Además, Jonas Kopp de Argentina y Efrén Mur de Alemania/España, ofrecieron en vivo Dynamics of Hyperspace.
El sábado 10 Palacio Alsina fue el cierre que se correspondía con los días anteriores de programación. MUTEK AR se lució en una maratónica tardenoche de más de doce horas ininterrumpidas de escenario vivo. Desde las 4 de la tarde más de 20 artistas performaron, con gran presencia argentina y consagrados internacionales, invitando al público a sumergirse en una suerte de sinestesia, entre lasers, visuales hipnóticas y un sonido exquisito. Una jornada que marcó lo ambicioso e impactante que puede ser un festival cultural.
«Sostener en el tiempo el impacto del festival es un desafío porque realmente hay que innovar todo el tiempo y haciendo que crezca; un festival que es muy ambicioso para ser cultural.»
Gonzalo Solimano, Director Artístico

«El regreso de MUTEK fue muy especial, un reseteo para la red internacional, arrancamos como un nuevo comienzo de festival. Lo veo muy positivo, si bien la parte online que se hizo durante la pandemia fue muy potente y unió a la red internacional y que los artistas sigan trabajando, la vuelta a la presencialidad tuvo también muchos nuevos artistas que aparecieron pospandemia». Nos cuenta Gonzalo Solimano , Director Artístico de MUTEK AR y Artlab.
MUTEK AR
MUTEK llegó a la carrera de Gonzalo en el 2000. Siendo una ONG y un festival de red internacional que llamó mucho su atención. Cuando Gonzalo estaba dando los primeros pasos en Artlab lo contactaron de la red MUTEK España y así llegó la posibilidad de conocer a todo el equipo de MUTEK Montreal, intercambiar visiones y dirigir MUTEK AR.
«Tener el festival dentro de Artlab es una ventana al mundo no solo para los artistas, sino también para el centro cultural.»
Artlab
«Dentro de los proyectos que continúan con MUTEK, Artlab nació con una identidad propia y encontró en MUTEK un partner estratégico que permite la visibilización de artistas locales a en diálogo con la red internacional y el poder tener Artlab abierto como centro cultural con un montón de proyectos corriendo semanalmente nos está dando una generación de comunidad más sólida.» Cuenta Gonzalo sobre el centro cultural que gestaron en Rosetti 93, Colegiales.
«Artlab tiene la función de potenciar la escena y ser espacio de visibilización con un nivel de calidad altísimo para artistas no solo consagrados sino también emergentes que no tienen la posibilidad de llegar a tener esos recursos. Me parece que Artlab como hub es clave para el impacto de la escena.»